Los azules dejaron en el terreno a los verdes y tienen dos opciones para avanzar
Por Nathanael Pérez Neró
Francisco Mejía conectó el imparable que definió el cerrado partido en el Quisqueya. (FÉLIX LEÓN)El Licey recuperó el timón del barco que lleva a la final. El miércoles en el Quisqueya, Francisco Mejía disparó un sencillo al cierre de la novena entrada que rompió el empate y dio la victoria a los azules por 2-1 sobre las Estrellas.
El resultado dejó a los añiles con foja de 9-8 y una victoria este jueves ante los ya eliminados Gigantes (7-10), en la Capital, sellaría su boleto a la defensa de su corona. Igual, un revés del Escogido (8-9) en San Pedro de Macorís también le daría el pase a los azules.
El único escenario que complicaría el avance de los 23 veces campeones sería la combinación de una derrota ante los potros y un triunfo de los rojos en la última fecha del calendario del round robin.
A pesar del tercer revés al hilo, los Serie 23 (10-7) aseguraron su presencia en la final con el tropiezo escarlata en el Julián Javier.
Se trató de un partido donde ninguno de los equipos cometió error.
Los verdes tomaron la delantera en la primera entrada. Dairon Blanco fue golpeado en su mano derecha por Nico Tellache, avanzó a segunda con rodado por tercera de Wilfred Veras y Robinson Canó lo remolcó con sencillo al izquierdo.
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La igualdad azul llegó en el tercero ante los envíos de Andy Otero. Tras Yadiel Hernández fallar con línea al campo corto y Arístides Aquino con elevado al central, Jack Mayfield pegó doblete al jardín central y Emilio Bonifacio disparó imparable por la misma vía que llevó el hombre al plato.
Los paquidermos amenazaron con romper el empate en el séptimo y llegaron a llenar las bases con boleto a Jonathan Arauz, hit de Christopher Familia y Blanco ante Jonathan Aro, pero Jean Carlos Mejía ponchó a Roel Santos para terminar la amenaza.
Los petromacorisanos volvieron a estar cerca en el noveno tras Vidal Bruján pegar sencillo al central ante Jairo Asensio, avanzar con toque de Raimel Tapia y elevado de Arauz, pero Alfredo Reyes se ponchó.
El desenlace llegó en la novena entrada anfitriona. Ramón Hernández abrió con imparable por el medio del terreno ante Julián Fernández y Magneuris Sierra entró a correr. Gustavo Núñez tocó para mover al hombre de la inicial y Mejía pegó el batazo ganador, un sencillo al central.
Ganó Asencio y perdió Fernández.
Bonifacio pegó doble y hit en cuatro turnos y Hernández ligó un par de sencillos para liderar a los azules. Por los paquidermos, Blanco se fue de 3-2.
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